“dale un pescado a un hombre y comerá un día, enséñale a pescar y comerá siempre”: Confucio
El proverbio chino, pensamiento – enseñanza en mención, escrito por el sabio filósofo Confucio, que a través de los siglos, desde el año 535 a.c., ha mantenido una transcendencia y un legado para la humanidad, nos permite meditar sobre el empeño que se debe tener para encontrar el camino hacia la superación y así pregonar la senda hacia la superación de las dificultades a través del conocimiento. Sería provechoso entender lo que representa esta enseñanza para los hermanos wayuu, ya que siempre han estado permanentemente bajo la ayuda asistencialista, lo que le ha generado es aumentar su problemática teniendo en cuenta que se acrecienta mucho más el flagelo de la desnutrición.
El desarrollar soluciones estructurales definitivas a las problemáticas en la Guajira es un permanente dilema, y para el caso específico de la desnutrición no han sido claras las decisiones de quienes han dirigido anteriormente al estado colombiano, como lo es su obligación según la Constitución Colombiana, entendiendo que el estado colombiano es el gobierno nacional, las administraciones departamentales y las municipales para erradicar el problema, como así no ha ocurrido.
Pero esa estrategia del asistencialismo es el botón que a los dirigentes políticos les facilita moverse en las épocas electorales, ya que es la bandera para poder mantener dormidos a la población y esclavizarlos a un esquema de caridad, donación o asistencia que permite mantener a la gente inactiva, lo que disfrutan por que se perdure una población más pobre para así poder implementar la famosa “ayuda” asistencialista. Un ejemplo claro y preciso de ese asistencialismo entre otros fueron las famosas ollas comunitarias que solo fueron pan para un día y el problema que se ha generado sobre ese programa, distinto sería establecer centros de producción agropecuaria donde los mismo indígenas puedan producir sus propios alimentos.
Se debe cambiar el chip, siempre son programas para asistencia para el pueblo wayuu, los que se traen del Gobierno Nacional, Departamental o Municipal, entregándoles alimentos a la población wayuu de manera temporal, quitándole la oportunidad de trepar desde ese pozo que los condiciona y donde se encuentran, al someterlos reiteradamente a no poder salir de él, sino para darles algo que los mantenga entretenidos allí en el fondo. Indudablemente no se les entrega a la población wayuu, la oportunidad ni la posibilidad de sobrellevar una pobreza digna, sino una que requiere todo el tiempo de intermediarios para que les den, ante una ausencia de chances para poder ejercer su mismo auto sostenimiento.
Este pensamiento del sabio Confucio, en la frase ”enseñar a pescar” significa el proceso de educar, enseñar y dar las herramientas necesarias para que las comunidades wayuu, puedan satisfacer sus necesidades sin depender de los asistencialismos temporales, además contribuye al desarrollo del pueblo wayuu y sus gentes.
Si en decisiones serias, se pretendiera encontrar soluciones estructurales a la problemática del hambre y la desnutrición del pueblo indígena wayuu, es solamente establecer unos proyectos de centros pilotos de producción agroecológica, pecuaria y piscícola donde además de producir alimentos, se formarían jóvenes que serían los forjadores de oportunidades de empleo y prosperidad de la población local, para así convertirse en un potencial o motor de progreso para sus comunidades.
Este proyecto está formulado por la Asociación de Ingenieros Agrónomos de la Guajira – ASIAGUA -, el cual queda a disposición del Gobierno Nacional, Departamental y Municipal para su ejecución y así poder ser replicado en otras zonas de los municipios objeto del mismo. Es por eso que proyectos como este con la anuencia del Gobierno del Cambio, puede quitarle el hambre para siempre a un pueblo con algo que no es material, ni tampoco consumible y eso se puede lograr, es con la capacitación – enseñanza, en una sola palabra “la educación”, solo así se puede erradicar la pobreza y la desigualdad en el pueblo wayuu, atendiendo uno de los preceptos de la agenda 2030.
Finalmente, se debe precisar que la génesis de la desnutrición es la falta o nula ingestión de alimentos, es por eso que solamente si se le ingiere alimentos al organismo, este tiene las vitaminas y nutrientes suficientes para no ser víctima de la desnutrición, así pues claro está que la falta de alimentos es la causa principal de la desnutrición en cualesquiera de sus fases, es por eso que hacemos un llamado a las entidades accionadas en la Sentencia T-302 de la Corte Constitucional y en especial muy respetuoso al Gobierno Nacional en representación del Sr. Presidente, a la Administración Departamental de la Guajira en cabeza de su Gobernador y a los Municipios de Uribia, Manaure, Maicao y Riohacha en cabeza de sus Alcaldes, de que ponemos a su disposición el proyecto en referencia en este artículo a fin de comenzar un proceso que debería estar en desarrollo desde hace mucho tiempo atrás, para que definitivamente podamos erradicar el temible flagelo de la desnutrición que ha causado miles de muertes ya conocida en la población de los hermanos Wayuu.
